Instalar una nueva puerta de garaje es una mejora residencial rentable que puede elevar significativamente el valor de tu propiedad, según estudios del sector inmobiliario. En promedio, este proyecto recupera entre 70% y 85% de su costo de instalación al vender la vivienda, posicionándose como una de las inversiones con mayor retorno. Además de la recuperación económica, una puerta de garaje moderna, duradera y estéticamente atractiva mejora el atractivo exterior de la casa, un factor crucial para atraer compradores potenciales. Modelos con aislamiento térmico o materiales resistentes como el acero o el cedro también añaden puntos extra al resaltar la eficiencia energética y la seguridad, características muy valoradas en el mercado actual. Dependiendo de la calidad, el diseño y las tendencias locales, una nueva puerta de garaje puede incrementar el valor de la casa entre 3.000 y 8.000 dólares.